El paro que fuera convocado por la CGTP el pasado 11 de junio y que fuera desmentido y denominado jornada de lucha hace unos días por Mario Huamán, no ha surtido el efceto esperado.
Sin embargo, esta confusión no se limitó al Secretario general de la CGTP si no que también alcanzó al gobierno, es decir a García y su cúpula aprista quienes no tuvieron mejor idea que mandar al Ejército a las calles, por si acaso. Claro y la otra medida por si a alguien se le ocurría acatar el Paro que no era paro, de aumentar 20 soles de bonificación para los que sí asistieran a su centro de trabajo.
Pero las cosas estuvieron así: en algunos puntos de la ciudad, grupos de huelguistas intentaron impedir la circulación de autobuses lanzando piedras contra las unidades, según reportes de prensa.
Un grupo de choferes de mototaxis se congregó en la Plaza Dos de Mayo del centro de Lima ocasionando obstáculos al tráfico vehicular. Los mototaxistas y choferes de transporte público protestan por la aplicación de fuertes multas por infracciones vehiculares, según establece un nuevo Código de Tránsito próximo a entrar en vigencia.
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