Berlusconi es el rey de las orgías

Publicado por Puca Picante 6/20/2009


En medio de lo de Bagua, Europa libraba una batalla aparte. Silvio Berlusconi, el dueño de casi todos los medios de comunicación en Italia y del AC Milán, enfrentaba la demanda de divorcio de su esposa, que había soltado una bomba sobre la vida personal de 'il cavaliere'. Algo que ningún medio italiano se atrevía a decir.

Verónica Lario, primera dama italiana, afirmó hace un mes que bajo el influjo de su marido, Silvio Berlusconi, la política italiana se ha convertido en una "basura impúdica", donde sólo cuenta el físico y la televisión, y en la que "muchos padres están dispuestos a cerrar los ojos para ofrecer sus vírgenes al dragón".

Berlusconi, primer ministro de Italia, no sólo maneja el flujo de información en Italia sino que ostenta poder en toda Europa. Tanto que le dijo a Sarkozy que el debería darle las gracias a Italia (por darle Karla Bruni). Berlusconi siempre ha sido un ser muy polémico, sus declaraciones y su actitud le han ganando antipatías con intelectuales como Saramago o con el genial Roberto Benigni.

Pero Berlusconi siempre caía de pie, todas las acusaciones nunca lo condenaban, algo pasaba en el camino. Sin embargo, un paparazzo reveló unas imágenes que fueron vetadas en Italia, y que incriminan a Berlusconi. Las fotos muestran constantes reuniones con jóvencitas (se habla de menores de edad también) conocidas como velinas en su mansión, en su yate, en varios lugares. Ningún medio italiano pudo sacar las fotos que lo incriminaban. Fue entonces que, El País se atrevió a hacerlo.

Desde España hasta Italia se libra una pelea contra la corrupción y la crisis mediática en Europa. Ya comenzaron las demandas contra El País. Esto sólo demuestra como un monopolio mediático puede ocultar una verdad tan palpable por años.


Las fotos:

0 comentarios

Publicar un comentario

De qué va

Este blog es un mini espacio para saber qué pasa en el Perú y el mundo. Todas las noticias tienen videos, porque -como bien sabemos- el internet es entretenimiento. Y estos políticos sí que entretienen.